ATARAXIA
"Mon Seul Dèsir"

2002 CRUEL MOON CD

Creo que no miento si digo que, todos los seguidores de Ataraxia esperábamos con expectación el nuevo trabajo de este trío italiano. También creo que, pocas cosas nuevas se pueden decir de esta banda que no hayan sido dichas ya. Es conocida la calidad de su música , la elegancia indiscutible de la voz de Francesca y el buen hacer del grupo en sus directos, los que hemos tenido la posibilidad de verlos y en más de una ocasión, así lo podemos atestiguar.

Ataraxia es artífice de una música que te transporta a otros tiempos, a otras civilizaciones y que, sin a penas darte cuenta, te envuelve de una forma tan mágica que consigue conquistar tus oídos. Y esto, una vez más, lo consiguen con "Mon Seúl Dèsir", la última entrega hasta el momento. He de admitir que me ha decepcionado un poco, probablemente porque, de las seis canciones que componen el disco, dos de ellas: "Jarem Gitti"(canción de amor del S.XIII) y "Mundus est Jocundum"(Carmina Burana) que se presenta ahora en versión extendida y que ya aparecía en el disco "Historiae" de 1998, son temas tradicionales ya conocidos. Además el cuarto tema "Sendero en Lago Verde", es un tema instrumental a guitarra, que aunque su belleza es indiscutible, no deja de parecer esa canción para "rellenar".

En su conjunto las tres canciones restantes siguen el estilo habitual del grupo (neoclásico, medieval o como se quiera llamar) y, junto a la voz de Francesca forman pasajes sonoros evocadores.

Destacar la colaboración de Francesco Banchini, de nuevo este polifacético músico vuelve a aportar su maravilloso juego vocal y se encarga de la percusión y las campanas en los dos temas tradicionales antes mencionados.

En definitiva, un disco que podríamos catalogar de bueno pero...que sabe a poco. Quizás el anterior trabajo "Sueños" dejó el nivel tan alto que sea necesario más tiempo para lanzar un trabajo más completo, o quizás este disco sea el preludio de algo mejor.

Mientras tanto sólo puedo hacer esta comparación: "Mon Seúl Dèsir" es ese caramelo que te metes en la boca, que saboreas, que te endulza y que justo en el mejor momento, ese en el que más te está sabiendo... se te cae al suelo.